L.B.H./ redacción.- Un hombre de mediana edad aparecía ahorcado hace una semana en un puente en La Bañeza. Al menos esa es la información que circulaba entre la ciudad por fuentes vecinales ya que está 'prohibido' hablar de estos temas (suicidios) y Subdelegación de Gobierno, Guardia Civil y Policía NUNCA INFORMAN de estos temas, obviándose, omitiéndose los suicidios, para que «no haya efecto imitación» dicen.
Hay más muertes al año por suicidio en España que por Covid en pandemia, pero este tema se oculta adrede por el Gobierno con órdenes explícitas de «no informar», aunque este periódico, en aras de la libertad de información (y por ayudar a resolver este problema y evitar futuras muertes), siempre hemos informado de los casos que nos hemos enterado que han ocurrido en la ciudad –chico en un pueblo a 12 kms de La Bañeza, persona en la C/ Manuel Diz lanzándose al vacío desde una ventana y cayendo sobre un coche hace años, o una menor en el instituto Vía de la Plata. Y es que estas personas que toman esta decisión lo hacen para transmitir un mensaje a la sociedad, mensaje que no llega porque es silenciado por las autoridades. Normalmente las personas que deciden suicidarse lo hacen para llamar la atención sobre un problema que están padeciendo, y es una crítica a la sociedad (y a veces al Gobierno), de que les hace vivir en una situación límite (por eso no le interesa al Gobierno que esto se sepa). Normalmente son gente que ven las puertas cerradas, que no encuentran trabajo, que no encuentran salida a su futuro incierto, y que no han recibido ayuda por las instituciones del Gobierno –es decir, su suicidio o intento, es un fracaso de la sociedad en la que vivimos–. Y como al Gobierno no le interesa que se conozca el fracaso del sistema social en el que vivimos, lo tapan silenciándolo. De hecho muchos de los menores que se intentan suicidar son personas que no han sido atendidas por el director de su colegio ante quejas de que sufren bullying en el colegio, una situación de acoso escolar que les hace una tortura ir al colegio, tanto que al final deciden acabar con su vida. Y su intento de suicidio es una llamada a la sociedad pidiendo ayuda para que se solucione su problema. Si una persona (niño) habla de esta manera: intentándose suicidar, y el Gobierno oculta el problema, la sociedad vive ignorante de que estos problemas pasan, y nunca les pondrá remedio. Por ello muchas asociaciones piden que se deje de ocultar / esconder, el problema de los suicidios, y que se informe de ellos. Es por lo que este periódico –cuyo director sufrió bullying/acoso escolar en el colegio, sumado a una situación familiar penosa por parte del padre, falta de amigos, madre que sufría malos tratos y tampoco le podía ayudar– le llevó también a llamar la atención de la sociedad gritando para decirla «tengo un problema ¡¡ayudadme!!» –es decir, se intentó suicidar lanzándose a un río (como publica en la primera parte de su autobiografía «Y sin embargo resisto/ Memorias de un asperger gay» editorial Círculo Rojo, a la venta en Tagarro Lector (La Bañeza), y amazon, la casa del libro on line, etc.– por lo que conoce de primera mano lo que se le pasa por la cabeza a alguien que se intenta quitar la vida o no lo intenta sino que lo hace para gritar y pedir ayuda «tengo un problema que no puedo con él ¡¡sociedad!!¡¡echadme una mano!!». «Si a estas personas [las que se intentan quitar la vida como forma de llamar la atención a la sociedad y gritar que tienen un problema] se las silencia y oculta su mensaje, les estamos haciendo un flaco favor. Se podría decir que es una omisión del deber de socorro por parte del Gobierno» explica el director de «La Bañeza Hoy».
«El intento de suicidio es una forma de gritar de ese menor que tiene un problema,
y si se ocultan estas llamadas de auxilio nunca se pondrá remedio ni se solucionará el
problema, y más chavales terminarán suidándose» Emilio García
«Otras veces no es una llamada de auxilio de quien se intenta suicidar, sino que es una manera de infligir castigo a sus acosadores. Es una venganza a esos chavales que le han hecho bullying en el colegio transmitiéndoles el mensaje 'por vuestra culpa, acosadores que me habéis hecho la vida imposible en clase cuando yo no me metía con nadie y era una buena persona, he terminado quitándome la vida. ¡¡Llevad mi muerte sobre vuestra conciencia!! (si la tenéis).» «Ese es el mensaje, es lo que significa, y lo que dicen muchos chicos que se suicidan en el colegio. Es bastante difícil que los imbéciles que hacen acoso escolar se sientan mal –porque son imbéciles y malas personas de nacimiento–. Si encima este mensaje del que se suicida, que quiere que lleven estas malas personas sobre su conciencia, se oculta por el Gobierno/autoridades ocultando el suicidio, el último mensaje de quien se quita la vida no llega a nadie, no trasciende. Y esto es un grave problema al que no se le pone solución, porque la sociedad al final no hace nada para ponerle remedio, porque como nadie sabe el problema –se ignora porque se oculta–, nadie le puede poner remedio» concluye García. Y si se oculta un problema la gente cree que ese problema no existe, y seguirá habiendo suicidios porque la sociedad, Gobierno / autoridades, no afrontan este problema y no le ponen remedio ni dan solución alguna.
