El alcalde comenzaba el pleno recordando que se refieren a empleados públicos, y que tienen el deber de sigilo, exigiendo guardar el máximo respeto en el ámbito de los datos personales. El concejal no adscrito, Luis Fernando Miguélez, comenzaba su exposición pidiendo “que se nos indique cuales son las retribuciones percibidas, así como en concepto de qué, y por qué tareas se percibe esa cuantiosa cantidad”, para ello exigía un informe conjunto de secretaría e intervención para que se les explicara el concepto de productividad y conocer sus límites para el año 2025 o si existen esos límites.
Laura Gallego (Vox), por su parte, declaraba que “ni ellos tienen muy claro por qué se celebra este pleno ya que uno de los convocantes ni está” (en referencia a la ausencia del concejal de UPL, César de la Mata). También destacó el hecho de que sólo se pidiera información sobre esas dos personas en concreto “ya que en el ayuntamiento trabaja mucha gente pero sólo les preocupan las retribuciones de ellos dos y el 90% de la plantilla del ayuntamiento recibe estas retribuciones”. Recuerda también la concejala que hay un programa llamado GESTIONA, con el que se trabaja en el ayuntamiento, en donde se encuentra la documentación “al alcance de la mano”.
Rodolfo Sánchez, portavoz del PSOE, reiteraba la petición de Miguélez pidiendo que “no queremos más que información” e insistió en la falta de transparencia del ayuntamiento, contestando a VOX que los datos no figuraban en GESTIONA, y relatando uno por uno todos los escritos reclamados desde septiembre de 2023. Se han solicitado y ninguno ha obtenido respuesta. Sánchez finalizaba su intervención destacando que este pleno “no es con ningún fin de perjudicar al ayuntamiento ni poner trabas, no sabemos por qué motivo se nos impide tener esa información”.
La intervención de Pedro Montiel (PP) se centró en destacar la observación de Gallego de que resultaba curioso el por qué se pedía información de esas dos personas en concreto e indicó que en la anterior legislatura también se hacían estas productividades. A su vez enumeró el concejal las tareas que han realizado los funcionarios a los que se refieren, de las que relató algunas de ellas, y que merecían una gratificación.
Por último el alcalde insistía en que no tenían que pedir un pleno por estos motivos, que toda la información la tienen en los decretos, “dejen ya de sortilegios, difamar, los bañezanos están cansados” y aplaudió el trabajo de los funcionarios a los que se les hizo la retribución por productividad. Respondía el alcalde que “la productividad la aprueba el alcalde, fiándose de los criterios de las personas que tenía confianza” y que “las retribuciones de ambos funcionarios son conocidas por todos los grupos en cada pleno ordinario por que se aprueban mes a mes (..) están aprobadas hace más de un año, son firmes e irrecurribles y esas retribuciones están perfectamente ajustados a la ley tanto en su cuantía como en la forma de su aprobación”. Aún así y en respuesta a la transparencia solicitada por la oposición, Carrera se comprometía a “responder la relación de escritos no contestados, previo informe de secretaría, a la mayor brevedad posible”.
