E. GARCÍA / REDACCIÓN.-Termina la polémica vecinal entre los vecinos de Incovasa, y la recogida de firmas que habían empezado uno y otro bando, con la tala del gran árbol. Evidentemente la acción ha causado indignación entre los vecinos que querían protegerlo y conservarlo, no así entre quienes querían que el ayuntamiento aprovechase las obras para quitarlo alegando razones de suciedad (caída de hojas –agujas–) y que las raíces levantaban el asfalto.
Los protectores de los árboles argumentaban razones ecologistas. Los árboles quitan la contaminación, bajan la temperatura de la zona en los sofocantes veranos dando frescor y sombra –cosa que no harán los nuevos que ponga el ayuntamiento hasta dentro de una década al menos (con lo que este verano habrá más calor en el barrio, ya que el sol se reflejará en el asfalto al no ser parado por las ramas de los árboles)–.