Se acabó el asfaltado de la segunda fase de la calle Lepanto, criticada por los vecinos y usuarios por estrechez en los angulos de giro en los cruces con las travesías en su primera fase (se podía haber ampliado el radio de giro para facilitar a los coches y sobre todo camiones, su entrada a las callea adyacentes, pero sólo se ha dejado un carril de tráfico y se han sacado las aceras hacia los dos carriles de estacionamiento de vehículos justo en los entronques con otras calles, lo que hace que los camiones que giran peguen con los bordillos o se suban a ellos.)
La concejalía de obras ha sido avisada de este incidente y otros –como la estrechez de los carriles de salida hacia el cruce de Odón Alonso (calle salida de la ciudad hacia León). Los vecinos opinan que se debería de haber dejado dos carriles de salida en toda la primera manzana de edificios, no como se ha dejado, que apenas caben dos coches, lo que podría causar atascos de tráfico (los coches que giran a León han de esperar en un stop mientras que los que van hacia La Bañeza sólo hacen un ceda el paso, pero al colapsarse las dos plazas el resto de vehículos que viniera detrás habría de esperar en caravana.–
La concejalía de obras estima, sin embargo, que la calle ha quedado muy bonita con aceras más anchas y con bancos y árboles.
Desde 'La Bañeza Hoy' pensamos que se podían haber conjugado mejor ambas ideas: transitabilidad y aspecto, quedando un proyecto medio (ni lo que han hecho desde Obras ni como estaba antes), es decir, dejar una calle bonita y transitable... ahora es bonita... pero poco transitable.
Por cierto, por chapuzas de presupuesto, se han dejado apenas 40 metros sin arreglar para una tercera fase.