El colectivo profesional quiere hacer visible el trabajo de las educadoras y los educadores sociales en Castilla y León, instando a trabajar para lograr el reconocimiento profesional autonómico que le corresponde, como acción educadora que contribuye al desarrollo de las personas como sujetos de derechos y responsabilidades compartidas con otros, para mejorar su calidad de vida, protegiendo, especialmente, a aquellos colectivos más vulnerable
El 26 de noviembre, de 12:30 a 15:00 horas el Colegio Profesional de Educadores y Educadoras Sociales de Castilla y León celebrará la reunión mensual de su Junta de Gobierno en el centro Nuestra Señora del Valle de La Bañeza (León). Previamente los miembros de la Junta visitarán las instalaciones para conocer, de primera mano, el funcionamiento del centro y la atención y el trabajo que el colectivo profesional de educadores y educadoras desarrolla con los usuarios.
El 31 de marzo de 2015 se cumplió el 10º Aniversario de la aprobación de la Ley de creación del Colegio Profesional de Educadores y Educadoras Sociales de Castilla y León. En estos años se han conseguido avances importantes para la profesión en nuestra Comunidad Autónoma, pero no han estado exentos de trabas y dificultades.
Este año se ha celebrado el VII Congreso de Educación Social en Sevilla y por ello reivindicamos la esencia de la profesión y de la Educación Social: DAR RESPUESTA AL CONJUNTO DE LA POBLACIÓN CON ACTUACIONES QUE CONTRIBUYAN A SU BIENESTAR, INTEGRACIÓN, FORMACIÓN Y PARTICIPACIÓN EN LA VIDA SOCIAL y llamamos la atención sobre la necesidad de la intervención de las/os profesionales de la Educación Social en el sostenimiento y apoyo a una ciudadanía que está perdiendo de forma acuciante unos derechos sociales conquistados democráticamente durante años, como consecuencia del nuevo modelo de gestión sociopolítica y económica que se está imponiendo ante la actual situación de crisis económica internacional.
Esta pérdida de derechos, tiene graves consecuencias en la vida diaria de las personas, aumentando el riesgo de exclusión social, generando injustas desigualdades sociales y, por tanto, fragilizando el sistema de sujeción de grupos y colectivos. De ahí la importancia de que se construya una red de intervención profesional en la que se cuente, también, con los/as educadores/as sociales, que pueda garantizar el sostenimiento de los niveles de integración y palie la agresión a la que estamos sometidos por la realidad actual.
Los educadores y las educadoras sociales de Castilla y León reclamamos un compromiso firme y serio, a los responsables políticos de las administraciones autonómicas y locales, de incorporar y reconocer, lo antes posible, a los profesionales de la Educación Social en el sistema de servicios sociales.
Nuestro colectivo profesional merece ser reconocido dentro de los servicios sociales de la comunidad y llamado por su nombre, Educadoras y Educadores Sociales.
Queremos que la EDUCACIÓN SOCIAL en Castilla y León EXISTA.
