Siguiendo con las cosas (sucesos) curiosos que ocurren en esta pequeña ciudad de La Bañeza, esta misma semana se conocía la sentencia contra un chapista (dueño de un taller de chapa) que parece ser que vendió 15 coches de alta gama... si se puede decir 'vender', porque sí, cobró el dinero de los mismos... pero nunca entregó los coches. La Audiencia considera probados los delitos de estafa y obliga a devolver 400.000 euros a este hombre al que le impone una pena de 21 meses de prisión.
El Ministerio Fiscal considera al chapista autor de un delito de estafa por el que el y solicitó una pena de cuatro años de prisión. Paralelamente se ha condenado al procesado a pagar 418.795 euros a las víctimas, en concepto de responsabilidad civil subsidiaria.
Hechos probados
Según el apartado de hechos probados del fallo, el imputado vendió en su calidad de representante legal de una chapistería 15 vehículos. En el caso de una empresa de montajes, el hecho de que el acusado no cumpliera su obligación de entregar el
automóvil, obligó a la compañía a alquilar otros vehículos, en una operación que tuvo un coste de más de 8.000 euros. El Magistrado considera probado que el 19 de enero del 2005 vendió un BMW 535 a una empresa, el 28 de abril del mismo año otro vehículo similar a un particular, que abonó en dos plazos 36.580 euros, no habiendo recibido ni el coche ni la devolución de la cantidad. El 14 de abril del 2005 una joven le compró al condenado un todo terreno BMW X3, pagando 40.000 euros de los que el imputado devolvió 12.000 tras hacer entrega de un BMW 525. El 22 de abril vendió a otra persona otro turismo similar por valor de 35.000, sin entregar el coche ni devolver el dinero.