Vecinos y comerciantes de Juan del Mansilla, indignados con la obra

E. García / Redacción.- Los vecinos y comerciantes de la calle Juan de Mansilla están que trinan con el ayuntamiento. La indignación vecinal ha ido 'in crescendo' cuando tras varios meses con su calle y negocios empantanganados, se ha descubierto el resultado de una obra, que desde el consistorio bañezano dicen, no queriendo saber nada de la avalancha de quejas que se están recibiendo en los últimos meses «que es cosa de Diputación», quejándose además de que es el ente provincial el que adjudica, subcontrata y se queda el márgen de la obra. La calle se ha empezado a levantar de nuevo en varios tramos, porque hay cosas que se han hecho mal. Y desde la zona temen que todo esté igual de mal y se tenga que hacer todo de nuevo.

«Chapuza»

«Han puesto las tuberías de agua de lluvia con caída positiva» nos decía un comerciante de esta calle, indignado no sólo con los meses que lleva perdiendo clientes su negocio, sino con el resultado, que califica de «nefasto» y «chapucero». Una tienda de maletas de la misma zona se queja de que «picaron una tubería» de agua y que la han vuelto a picar. De hecho esta tienda cerró y efectuó una reclamación en enero de estos problemas ocasionados en octubre, al inicio de las obras, obras que llevan sufriendo y padeciendo más de cuatro meses.

Parece ser que la acera delante de la Cofradía de Ntro. P. Jesús Nazareno tampoco quedó bien y a indicación de los cofrades se ha vuelto a hacer.

«La arquitecta ha pasado a supervisar la obra y ha visto cómo ponían esa tubería mal y nadie ha dicho nada. O no han visto nada. ¿Cómo es posible que un arquitecto no se dé cuenta de que una tubería está mal inclinada y que no tiene la pendiente adecuada?» se preguntaba un vecino de esta zona al ver levantar de nuevo una parte de la calle. «¡¡Como hayan puesto la tubería así –unos vecinos dicen que a ras de tierra, otros que con caída positiva– y tengan que levantar de nuevo toda la calle!!!» decían clamando al cielo.

El comercio local de Juan de Mansilla ya se quejaba de las pérdidas económicas que iba a suponer a sus negocios el tener esa calle abierta en Navidad. El Alcalde de La Bañeza, D. José Miguel Palazuelo, ya respondía meses atrás que la obra no era competencia de ellos –del ayuntamiento–, sino de Diputación de León, pero que iba a hacer todo lo que estuviera en sus manos para acelerar los trabajos todo lo posible para que estuviera lista para los Carnavales de febrero. Ha llegado marzo y la calle sigue sin terminar... y lo que es peor, volviéndose a levantar en ciertos tramos porque algo ha quedado mal rematado.

Bañezanos nos contaban desde la misma calle que es que «subcontratan a gente que no ha visto una pala nunca». Que «por pagar menos a la gente, traen a gente que no ha trabajado nunca en obras delegándola hacer cosas que no saben y luego pasa lo que pasa.» No sería la primera vez, ya que en otra obra que presenció este periódico, realizada por inmigrantes, estos tuvieron que levantar tres veces el cemento de la orilla de la acera y el asfalto, el que recoge el agua de lluvia para llevarla a las alcantarillas, porque no habían hecho primero la pendiente –lo dejaron llano–, luego hicieron la pendiente mal, y se tuvo que cementar una tercera vez para dirigir el agua de lluvia a las arquetas del alcantarillado.
Desde la zona hablan de un cambio de empresa para finalizar esta calle. Unos dicen que mejor, porque si «se les deja a estos colocar las baldosas no queda una bien». Otros sin embargo dicen que así estaba planificado desde el inicio. Lo cierto es que los vecinos han padecido ruidos –de la maquinaria trabajando–, barro, tener que ir saltando zanjas, desde hace seis meses... y lo que temen es que en vez de finalizar esto vaya para largo.